martes, diciembre 09, 2014
0
EL ESTADO FEDERAL

Tener que escribir casi todos los días un artículo para la prensa sin poder desatender las muchas obligaciones, políticas, profesionales y familiares del autor, es si duda la causa de que algunos de los que se publican no estén suficientemente estructurados, no tengan la menor novedad o simplemente no reflejen lo que el autor hubiera querido decir.


Eso ha debido suceder en el que el pasado día 4 publicó en La Verdad el Dr. González Tovar, candidato socialista a la Presidencia de la Comunidad. El artículo, lleno sin duda de una indudable buena voluntad, es un jardín de lugares comunes y argumentos mil veces oídos, para terminar con lo más increíble: para que “todos los españoles seamos iguales y dispongamos de los mismos y derechos” (sic) es imprescindible un estado federal, el único que lo garantiza. Tenemos que acostumbrarnos, al menos hasta las próximas elecciones generales, a aguantar la pertinaz tabarra del cambio constitucional como la idea luminosa del socialismo: su piedra filosofal. Se ve que tienen añoranza del éxito de los cantones de la república del s. XIX… ¡Fue una época tan brillante!... 

Pero yo no termino de entenderlo. Empezando porque el sistema federal es el elegido por naciones independientes que deciden unirse en una federada como sucedió con Estados Unidos o Alemania o podría haber sucedido con Italia, que cuando en España llevaban un siglo de existencia las Reales Sociedades Económicas de Amigos del País, aún estaba dividida en naciones, no solo independientes sino, la mayoría de las veces, enemigas. Así siguió hasta la aparición de Garibaldi y se remató con la marcha sobre Roma. Y aún así, no se convirtió en federal. Los italianos no son tontos.

Tenemos en la historia casos de naciones fictíciamente unidas que se han disgregado (Yugoslavia, Checoslovaquia, la URSS…) pero jamás un nación ha pasado del centralismo a las autonomías y de ahí al federalismo.

Es el caso de España, la nación más antigua de Europa. Se trata de una nación consolidada como unitaria hace más de medio milenio (con todas las peculiaridades que se quieran), pero una sola nación desde tiempos de los Reyes Católicos (como en gran parte lo fue en la época de la civilización romana y los godos) y que ahora se pretende federalizar, esto es, disgregarla para (¿) “que todos seamos iguales”.

El Dr. González en su artículo enumera alguno de los problemas que acucian a los españoles: “económicos (cierres de empresas, elevado incremento del desempleo, crisis bancaria), sociales (desahucios, incremento de los niveles de pobreza, recortes en sanidad, educación y servicios sociales) e institucionales (pérdida de credibilidad de las instituciones, la judicatura, el descrédito de la política…). Todo ello, además, agravado por los numerosos escándalos de corrupción”. Yo me pregunto cual de estos problemas se resuelve convirtiendo a España en un estado federal. Esta estructura machaconamente nos la presentan como la panacea de todo problema. El estado federal ¿resuelve las dificultades de nuestra patria o supone un paso más para la consecución de la proyectada independencia de una parte de España? ¿Qué puede satisfacer a los separatistas en una federación que no encuentre en un estado autonómico? ¿Cubrirían sus expectativas una vez federados o, más bien, les sería así más sencillo o legal pasar a independientes? ¿Somos tontos? 

Los problemas quizá puedan suavizarse para todos, incluidos los catalanes (los separatistas, al no considerarse españoles tampoco pueden ser considerados auténticos catalanes) con una justa financiación que haga iguales a los individuos, aunque no lo sean las regiones. Para eso solo es precisa alguna modificación de la constitución pero no la que pretende el partido socialista. No quieren modificarla sino cambiarla, iniciar un periodo constituyente en toda regla… ¡volver a empezar!

Si se preguntara a los españoles, quizá la modificación que desearían sería la que “refuerce las fuerzas centrípetas que cohesionan, frente a las centrífugas que disgregan” como dice el colectivo “Hispania Nova”. 

El Estado no debió transferir la educación y seguramente hubiese evitado alguno de los problemas que ahora ahogan a España.

José Antonio Caride de Liñán.

0 comentarios:

Publicar un comentario